miércoles, 10 de octubre de 2012

Preparativos viaje a Iran

Aquí estamos con una nueva aventura. Ya el año pasado estuve a punto de irme a Irán pero al final me salio una buena oferta a Cuba y para allá que me fui.
En este caso, se podría decir que ha sido al contrario. Después de una primera idea de ir a Costa Rica, lo he descartado por el clima en esta época y el destino es Irán.

Lo primero que tengo que solucionar es el problema del sello de Israel en el pasaporte. Bastante sencillo. Al llegar a la oficina de pasaportes le dije que necesitaba uno nuevo porque con sello de Israel no me dejan entrar en Irán y no me ponen ninguna pega para darme uno nuevo. Eso si, tengo que pagar 25€ y la fecha de caducidad es la misma que tenia en el pasaporte viejo.

Solucionado este problema ahora viene la gestión del pasaporte.
Según la web, solo puede tramitarse en la embajada en persona. Yo tuve que pedir a unos amigos en Madrid que me lo hicieran. Gracias a Dioni y familia. Pero algunos compañeros de viaje lo hicieron mediante mensajero. Así que de esta manera también se puede hacer.

Lo siguiente comprar los billetes. La embajada iraní te recomienda que no compres el billete hasta que tengas el visado. Nosotros le hicimos caso.

Para ahorrar dinero hacemos unas cuantas peripecias. Volaremos desde Biarritz a Paris con Air France y desde allí a Teheran via Estambul con Pegasus. Este billete lo compramos con BudgetAir que, misterios de internet, lo tiene mucho mas barato que la propia compañia.

Finalmente seremos 5 en el grupo. Paula, la "Rubia", Juana, Ricardo y yo.

Llegada a Iran

Día de viaje

Si, cuando digo "de viaje", digo bien, porque nos hemos pasado mas de 24 horas entre coches, aeropuertos, aviones, autobuses y taxis..
Comienza con un madrugón para llegar a las 7 a Donosti. Recojo a Paula primero y a Ricardo después y nos vamos a Behobia donde nos juntaremos con Juana y "la Rubia".
Dejaremos mi coche allí y seguimos los 5 en el de la Rubia hasta el aeropuerto. Lo dejamos aparcado cerca del aeropuerto, pero fuera del parking. Que hay que ahorrar.
Empieza la aventura. Vuelo a Paris Orly. Tomamos el Paris Orlyval que es una especie de metro que comunica la terminal Oeste con la Sur. A esperar unas horas y vuelo a Estambul.
Llegamos a Estambul y antes de pasar la seguridad nos toca sacar la tarjeta de embarque en un mostrador que tiene Pegasus allí al lado.
El aeropuerto de Estambul es de los mas caros que he visto jamas. Como se pasan. De todas formas, es momento de tomarnos la ultima cerveza antes de convertirnos en abstemios durante casi 3 semanas. La de tercio, 6€, la de medio, 7€ y la de 3/4, 8€. Esta claro, pedimos de 3/4 y a compartir.
Tras otras cuantas horas de espera a la 11 de la noche embarcamos rumbo a Irán. Ya va quedando menos.
Cuando el capitán anuncia que vamos a aterrizar se empieza a ver movimiento entre las mujeres. Toca ponerse en pañuelo. En Irán es obligatorio y en los hoteles se ven carteles que te lo recuerdan. Por mucho que sean hoteles de turistas, el pañuelo lo lleva todo el mundo.
Pasar el control de pasaportes nos lleva casi una hora. Increíble lo lentos que son. Si vais con prisa, mal asunto.
Bueno, ya estamos en tierras persas. Lo primero, cambiar dinero, y aquí percibimos
porque la gente dice que los iranís son gente de fiar. El hombre que esta en el banco, con su ingles muy básico, nos dice que cambiemos muy poco. El nos puede dar menos de 15.000 IRR y nos avisa de que en el hotel nos darán 25.000 IRR.
Cambio hecho, ahora toca buscar el bus que nos lleve a aeropuerto de vuelos domésticos, Mehrabad. Seguimos las indicaciones que nos llevan hacia la izquierda y rápido, un señor nos dice que aquel es el sitio y que tenemos que esperar una media hora. Hasta las 04:30. Mas o menos a esa hora, llega el bus y para allá nos vamos. Es casi una hora de trayecto y cuesta 30.000 IRR. Menos de 1€.
El bus para en las 2 terminales. Hay que estar atento para bajarnos en la que nos toca.
La terminal es bastante pequeña. Nos toca esperar hasta las 8.00 pero antes tienen que venir a traernos los billetes de avión. Los vuelos domésticos no se pueden comprar desde el extranjero y los compramos a través del Hotel Niayesh. Gente fiable.
Desayunamos algo en el aeropuerto y nos pareció bastante caro. Después de estar mas de 2 semanas en el país, ahora nos parece carisimo.
Llegamos a Kerman muy cansados y con sueño. Llevamos mas de 24 de viaje y 4 vuelos en el cuerpo. El hotel que habíamos elegido era el Akhavan y cogimos 2 taxis hasta allí. 50.000 IRR cada uno.
Después de regatear un poco nos deja una doble y una triple, con desayuno y cena por 2 millones de IRR (unos 63 € al cambio de ese día).

Kerman dia 1

Día 1 del viaje.

Las chicas están cansadas y deciden que se van a echar un rato. Ricardo y yo nos vamos a descubrir la ciudad y cambiar dinero.
Nos liamos en la primera rotonda y andamos cerca de una hora sin saber muy bien donde estamos. Cuando nos situamos es casi la 1 del mediodía. A esa hora supuestamente cierran las oficinas de cambio y nosotros estamos sin un Rial. Tenemos suerte y cuando llegamos a la casa de cambio en la C/Qods esta abierta. El cambio que conseguimos es de 31.200, que a nosotros nos parece muy bueno.
Ahora que ya tenemos dinero en el bolsillo, que incluso somos multimillonarios, ya podemos irnos a comer.
Damos una vuelta por el bazar y al salir encontramos de casualidad el Restaurante Ganjali Khan, que viene en la Lonely, y que esta en un subterráneo .Decidimos que es buen sitio para nuestra primera comida iraní.
La carta solo en farsí. Mas o menos nos aclaramos para pedir, porque los chicos que hay allí tampoco hablan mucho ingles. La variedad es Irán es pequeña. Pedimos un kebab de pollo con arroz, unas verduras con arroz y un koresh, que es un guiso típico iraní. Las verduras resultan ser unos "hierbajos" y un trozo de cebolla, jeje. Los hierbajos son de menta y en el viaje descubriremos que es típico que te ponga un plato con menta y gajos de cebolla. Se come con pan a modo de aperitivo. Ricardo es vegetariano y empieza a darse cuenta de que la cosa va a estar complicada.
Aunque el sitio es cutrillo para el estándar que tenemos aquí la comida esta bastante bien y es muy barato. Pagamos 130.000 entre los 2 (4€).
Después de comer vamos al encuentro de las chicas. Habíamos quedado a las 3 en el hotel pero pensamos que era mejor llamarlas al hotel y decirles que las esperamos en el centro porque por lo menos hay 20-25 minutos de caminata. Queremos comprar una tarjeta SIM pero no hay casi nada abierto. Hay muchas cabinas pero no tenemos monedas. Al final entramos a una heladería a ver si nos cambian monedas. El hombre nos manda a una tienda que hay al lado pero el dependiente tiene toda la pinta de estar dormido, ya sabéis la siesta es internacional y decidimos no despertarlo. Se nos ocurre volver a la heladería y comprar un helado, y decirle que las vueltas nos las de en monedas. Esta vez hay un hombre que habla un poco de ingles. Después de un rato intentando convencerlo de que nos de monedas, nos damos cuenta que nos ha entendido perfectamente pero nos esta diciendo que las cabinas solo funcionan con tarjeta. Seremos pardillos.
Al final, el hombre coge el teléfono de la heladería, llama al hotel y le dicen que las chicas ya han salido. Son las 3.15 y acaban de salir.
Vamos a su encuentro. Esperemos que no se pierdan, como nos ha pasado a nosotros, y entonces nos las encontraríamos de frente. Ellas se orientan mejor que nosotros y nos encontramos.
Una vez que estamos juntos nos vamos otra vez al bazar. Pensamos que es buena idea ir a un hamman que recomienda la Lonely y que han reconvertido en casa de te. Es el Hamman e-Vakil Chaykhaneh.  Ricardo y yo lo habíamos visto por la mañana, así que nos vamos directos hacia allí. Tienen música en directo y hay bastante gente fumando shishas. Nosotros al principio no la pedimos porque no teníamos pensado fumar pero al final nos animamos. Joder, si nos animamos.
Que esa fue la primera pero después casi todos los día caían un par. A falta de cervezas, ese era nuestro vicio.
Después del hamman paseamos un poquito mas y nos fuimos pronto al hotel. Creo que ya comente que teníamos la cena incluida en el precio. Nos sirven lo que ellos quieren pero la verdad es que la variedad esta muy bien y la cantidad también. Así que merece la pena.

Kerman dia 2


Día 2 del viaje.

Nos levantamos prontito y desayunamos en el hotel ya que lo tenemos incluido. El desayuno no esta mal pero no es para echar las campanas al vuelo.
Ayer por la noche hemos contratado desde el hotel una excursión para hoy por los alrededores de Kerman. Como somos 5 tenemos que ir en 2 taxis. Nos cobran 1 millón de Rials por cada uno. Unos 60 € en total.
Los taxistas no hablan casi ingles asi que se limitaran a llevarnos a los sitios que habíamos acordado. Rayen, Mahan y los Kaluts.
La primera parada es la ciudadela de Rayen. Hasta que sucedió el terremoto de Bam de 2003, en el que su ciudadela quedo destruida, Rayen prácticamente no era visitada por los turistas pero ahora supone una alternativa a Bam. Es mucho mas pequeña pero esta relativamente bien conservada.
Es increíble que una construcción se adobe se mantenga durante mas de 1.000 años.
Dicen que ocupa unos 20.000 m2, que vienen a ser 2 campos de fútbol y dentro se pueden ver diferentes zonas y edificios. Las casas del "populacho", las caballerizas, la Casa de la Fuerza, la Casa del Gobernado.
Fuera de la ciudadela hablamos con un grupo de chicos y chicas iranís. Nos dicen que ellos de allí se van a una cascada que hay por allí cerca y nos invitan a ir con ellos. A nosotros nos parece buena idea pero cuando ellos se lo comentan a los taxistas, a estos no le gusta mucho. No sabemos si es porque no era lo negociado o porque no tenemos mucho tiempo. Posiblemente sea lo segundo.
Nos quedamos con las ganas de irnos con los chicos pero nos vamos a nuestro siguiente destino, Mahan.
En Mahan visitamos el Mausoleo del Shah Ne'matollah Vali, donde nos sucede una de las anécdotas del viaje. En esos días se estaba celebrando el festival de cine de Kerman y ese día los habían llevado a  Mahan a visitar el museo. El caso es que abrieron una zona del mausoleo que habitualmente esta cerrado y nos invitaron a visitarlo con los actores y directores. Incluso nos presentaron a un actor muy conocido y a una de las mejores directoras iranis. O eso nos dijeron. Allí  cuando eres extranjero todos quieren que estés a gusto.
Después de la visita ya tenemos hambre y decidimos comer en un pequeño restaurante que hay en el propio edificio, justo en la entrada.
La comida, lo habitual. Los taxistas comen con nosotros y piden yogurth para beber con la comida. Alli toman mucho yougurt liquido.
Finalizada la comida, nos vamos a visitar unos jardines a la afueras de Mahan, el Bagh-e Shahzde. 
Este jardin es una de los nueve que esta incluido en los "jardines persas" y que en su conjunto están considerados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Es un bonito jardín con muchas fuentes y canales escalonados pero cuando estábamos visitándolos se puso a llover y no pudimos disfrutarlos mucho. De la poca lluvia que vimos en nuestro viaje. Nos resguardamos como pudimos y mientras esperábamos a que parara de llover un montón de chicas se arremolinaron entorno a nosotros para hacernos preguntas y sacarse fotos con nosotros. Una vez mas, los extranjeros somos el foco de atención. Los jardines estaban llenos de chicos y chicas jóvenes que debían venir de excursión con el instituto.
Cuando para de llover seguimos nuestra ruta hacia los Kaluts, también conocidos como los castillos de arena porque son unas formaciones que salen de la mitad de la arena del desierto y parece que no esta muy claro como se crearon.
Nada mas llegar nuestros taxistas deciden que es el momento de la merienda a base de sandía. A mi no me gusta la sandía pero mis compañeros dicen que esta muy buena. Al salir de la ciudadela de Rayen nos habían dado un te con unas pastas. Después de la merienda nos vamos a vamos hacia arriba en uno de estos Kaluts para sacar fotos y ver la puesta de sol. Con la luz que hay en ese momento y el color gris de la arena, parece que estamos frente al mar en vez de frente al desierto. Rápido nos damos cuenta de que no vamos a poder ver la puesta de sol porque hay nubes en el horizonte. Mientras estamos arriba llegan 2 coches llenos de iranís. En menos de 5 minutos ya han desplegado la alfombra, la comida, musica en el coche y todo lo demás. Definitivamente son los reyes del picnic.
 Uno de los chicos nos ve arribe allá que se viene con una sandía para ofrecérnosla. No hay manera de negarse. Otra muestra mas de la hospitalidad persa.
Se confirma que no vamos a poder ver la puesta de sol asi que nos vamos de vuelta.
Cenamos en el hotel y a la cama. La cena que nos pones es diferente a la del dia anterior y también esta bien.

Kerman-Yazd

Día 3 del viaje.

Después del desayuno nuestra primera tarea es comprar los billetes de autobús para ir a Yazd por la tarde. Según la Lonely hay una agencia en la gran rotonda que hay cerca del hotel.
Cuando estamos allí nos aborda una chica porque nos ve con la guía y  bastante perdidos. Le decimos que buscamos una agencia y ella misma nos acompaña porque el letrero esta en persa y claro, nosotros no la habríamos encontrado jamas ya que estaba en una entreplanta. Cada día nos parece que la gente es mas simpática. Ninguna de las 2 chicas de la agencia habla ingles pero nos las apañamos para comprar los billetes. Son 70.000 (2 €) por persona y tarda unas 5 horas.
Nos damos una pequeña vuelta por Kerman, visitando el bazar, la mezquita. Para volver cogemos unos taxis que nos lleven al hotel para recoger las mochilas y de allí a la estación de autobuses para irnos a Yazd. Una vez mas tenemos que echar mano de las señas y te la imaginación para que nos esperen mientras recogemos las mochilas. En total nos cobran 70.000 IRR por taxi. Lo que nos pareció algo caro.
El autobús sale con algo de retraso y le cuesta bastante salir de Kerman. Nos dan un zumo y unas galletas para el camino. Aquí es habitual en todos los autobuses. Los autobuses son como los de aquí. Normalmente de la marca Volvo o Scania.
Cuando llegamos a Yazd ya es de noche. Tomamos un taxi que nos lleve hasta el Hotel Silk Road que es un hotel de los que llaman "tradicional" y era el que habíamos elegido. Pagamos 500.000 IRR (14 €) por la doble y 600.000 IRR (17 €)
 por la triple. Nos dan justo las que están al lado de la entrada y pensamos que pueden ser ruidosas, pero para nada. Estos hoteles "tradicionales" tienen un patio central con arboles y jardines, y algunas veces hasta fuentes, donde sitúan su restaurante y alrededor del cual están las habitaciones.
Después de acomodarnos en el hotel nos vamos a cenar al Malek-o Tojar. En nuestra opinión de lo mejores que probamos en Aran y calidad-precio creo que el mejor. 500.000 IRR la cena para los 5, incluidos los tés y pastas de la sobremesa. Este restaurante esta dentro del hotel "tradicional" del mismo nombre y en vez de mesas tiene una especie de divanes. Algo muy típico en Irán y a lo que ya vamos acostumbrándonos. No es lo mas cómodo en el momento de comer porque tienes que estar echado hacia adelante pero si que es muy cómodo para el momento de relax posterior o para fumarte unas shishas.

Yazd dia 1

Día 4 del viaje.

Tras dejar Kerman a nuestras espaldas, ya estamos en Yazd. Una de las ciudades mas turísticas de Irán, que forma parte del triangulo Yazd-Shiraz-Isfahan y que son las ciudades que se consideran indispensables en cualquier viaje al territorio persa.
Hemos pensado que lo mejor para la visita a la ciudad sera seguir la ruta que indica la Lonely.
Lo primeros que vemos desde la puerta del hotel es la preciosa cúpula del mausoleo de Sayyed Roknaddin y que es uno de los símbolos de la ciudad y que se puede ver desde cualquier punto elevado.
Empezamos visitando la mezquita Masjed-e Jamed. En casi todas las ciudades hay mezquita con este nombre y suele ser la principal. Se podría traducir como Mezquita del Viernes o de la celebración. Nos recibe con toda la fachada llena de andamios. La cúpula central también cubierta con andamios. Y en el interior,  parte de suelo levantado donde vemos que están haciendo excavaciones. Aun así bien merece la visita. El pórtico de entrada es los mas altos de Irán aunque queda bastante deslucido por los andamios. Tiene minaretes de 48 metros de altura. Sin embargo si que se puede apreciar la grandiosidad de la bóveda de la cúpula y los maravillosos mosaicos del mirhab.
Nuestra visita sigue camino de un "ab anbar", reservorio de agua, que esta rodeado por 4 "badgirs" que son unas edificaciones muy típicas de Yazd y de las zonas desérticas. Estos badgirs son los aires acondicionados persas y aprovechan el aire y el agua de los "qanats", canales de agua, para refrigerar las casas, mezquitas, etc... El principio en el que se basan, el mismo que las torres de refrigeración y los botijos. Defecto profesional.
Luego visitamos una casa tradicional, Khan-e Lari, que, la verdad, no merece la pena. Eso debe saberlo hasta el que cobra las entradas porque aunque eramos 5, dijo que solo nos cobraba 3 entradas. Si serán honestos estos iranís. Y eso que la entrada solo eran 5.000 IRR (0,15€).
Lo siguiente en la ruta marcada eran La Tumba de los 12 Imanes, que estaba cerrada y La Prisión de Alejandro que, como se suele decir, ni era prisión ni era de Alejandro Magno. Debe estar contrastado científicamente pero siguen llamándola así.
En ese momento vimos a un montón de mujeres con pancartas y pensamos que era una manifestación. Preguntamos y un chico nos dijo que no, pero no conseguimos entenderle que era lo que hacían.
Mientras decidíamos hacia donde ir se nos acerco una chica de la oficina de turismo que hay al lado y nos ofreció una excursión a Kharanaq, Chak Chak y Meybod por400.000 rials/persona (12€). Después de aceptar, pagar una señal y salir de la oficina de turismo, cuando todavía estábamos en la plaza sacando unas fotos la chica salio de la oficina y nos dijo que su jefe había dicho que eran 450 en vez de 400 como habíamos acordado. La excusa, que eramos extranjeros, entradas mas caras y no se que. Le dijimos que no y ella nos dijo, que como nosotros viéramos. No insistió mucho.
De allí nos fuimos a visitar un "Hosseinieh". En la parte de atrás hay un edificio en reconstrucción en el que se puede subir al tejado y tener maravillosas vistas de la ciudad. En él nos encontrábamos a un señor trabajando en la reconstrucción de los mosaicos y aunque no hablaba ni una palabra de ingles se las arreglo para explicarnos todo lo que hacia. Una de las grandes sorpresas de esta ciudad.
Llegado este punto, el calor ya apretaba y nos metemos en el bazar, donde encontramos una tetería a la derecha que un cartel llamativo con el nombre de "Premium Teahouse". El sitio se podría considerar como cuchitril. Hay que bajar unas cuantas escalera y se ve que no es un sitio donde estén acostumbrados a nosotros.  Se echan unas risas con nosotros. No es muy común ver mujeres fumando shishas en Irán y allí estaban Paula, Juana y la Rubia. Después de no ser capaces de conseguir que una de las pipas tirara, y de que uno de los chicos que había allí lo intentara sin éxito, se dan cuenta de que al viejete que lleva el garito se le ha olvidado agujerar el papel aluminio. Juvenil!!! No veáis como se descojonaban todos!!! Sitio humilde pero en sitios así es donde se realmente se aprecia como es la vida de un pueblo.
Comemos unas samosas en el local de fast food cerca de la plaza Amir Chakhmaq y lo rematamos con un helado en una heladería que hay a la vuelta de la esquina, ya con vistas al Hosseinieh Amir Chakhmaq, que también tiene andamios en la fachada. Se nos pega un chico y parece que no tiene pensado irse. Es habitual encontrar chicos por Irán que parece que no tienen nada mejor que hacer que pasearse con turistas y practicar su ingles. Esta claro que es la mejor manera de aprenderlo.
Nos despedimos de él y nos vamos a ver el Templo del Fuego zoroastriano. Cuando llegamos aun esta cerrado así que esperamos una media hora a las afueras de un kebab que hay justo enfrente. El templo nos decepciona un poco porque lo único que se ve es la "llama eterna" detrás de un cristal. Dicen que esta llama lleva encendida mas de 1500 años, en Yazd desde hace mas de 500 años. El fuego es símbolo de divinidad para los zoroastrianos.
De vuelta al centro de la ciudad, por fin consigo que un chico me active la tarjeta de teléfono móvil de IranCell que había comprado un par de días antes en Kerman. Fue todo un fallo no haber comprado la tarjeta en el IKIA. Hemos perdido bastante tiempo pero ya podemos llamar a casa por menos de 0,10 €/min.
Con este problema resuelto cogemos unos taxis para que nos lleven a las Torres del Silencio. Podríamos decir que esto es lo mas significativo de todo Yazd y creo que no se puede encontrar nada igual en todo el país. Es mas, creo que ya únicamente hay una que se utiliza y esta en Bombay.
Los taxis, con 30 min de espera para visitar las torres, nos salen por 100.000 IRR (3€) cada uno. Bueno, lo habíamos negociado por 80 pero los taxistas no son lo mas honesto de  Irán.
Las torres son bastante mas grandes de lo que imaginaba. Bueno, me las imaginaba mas estrechas y mas altas. No se usan desde los años 60 pero es curioso que solo hace 50 años todavía hubiera gente que dejara que los cuerpos de sus muertos los devoraran los buitres.  Para los zoroastrianos los cadáveres son elementos impuros y no entierran los cuerpos para no contaminar la tierra. Bueno, eso es lo que hacían antes.
De vuelta en la ciudad nos volvimos a encontrar con el chico que habiamos conocido al mediodía. Otra vez se nos "pega" y al preguntarle por un sitio para fumar una shisha, él se ofrece a llevarnos. Después de llevarnos a unos cuantos sitios que no nos gustaban o que, principalmente, no tenían shishas, acabamos en el Hotel Mehr.
Un hotel de los de nivel de Yazd. Tampoco tienen shishas pero ya estamos cansados de dar vueltas y nos quedamos tomando un té.
Para cenar hemos elegido el Bath Khan que es un restaurante que esta en un antiguo "hamman". En la ultima guia de la Lonely ya no esta y lo entendemos perfectamente. Es bastante desastre. Mucho peor que el Malek-o Tojar

Yazd día 2

Día 5 del viaje.

A las 8.30 estábamos en la oficina  de turismo para irnos de excursión. Al llegar nos dicen que tenemos que pagar el resto. 250.000 riales cada uno. Le decimos que no y que únicamente le daremos 200.000 ya que es lo que habíamos pactado. Aquí viene uno de los momentos mas sorprendentes del viaje.

Con nosotros viajara un chico japones y el encargado se acerca a él y le devuelve 50.000 rials diciéndole que él no va a pagar mas que nosotros. Increíble pero cierto. Jamas había visto en ningún sitio del mundo ni se si lo volveré a ver. Esta claro que los persas son diferentes.
Para la excursión vamos en una furgoneta de 9 plazas y llevamos un guía que habla bastante bien inglés.
Nuestra primera parada es Kharanaq. Una villa hecha de barro en el desierto y que esta prácticamente deshabitada. La visita merece la pena porque allí hay un minarete "vibrante". Subir a él requiere un poco de habilidad ya que hay que subir por una escalera de caracol muy estrecha. Yo subí el primer tramo y Ricardo, Paula y el japones subieron hasta arriba.
La sensación cuando los de arriba movían el minarete era magnifica. Aunque parezca imposible que puedas hacer temblar un minarete, me dijeron que era bastante sencillo. Tuvimos que pagar 30.000 ríales (1€) cada uno por subir
Tampoco hay mucho mas que ver y nos vamos hacia Chak Chak.
En Chak Chak hay un templo del fuego y es un lugar de peregrinaje zoroastriano.
La sensación que nos llevamos fue un poco parecida a la de ayer en el templo del fuego de Yazd. Bastante decepcionante. Creo que fue ahí donde la Rubia decidió que no volvía a pisar un tempo del fuego, jeje.
Ahh, y como curiosidad, un cartel que pone que las chicas que tienen "esos días" no pueden entrar. Habrá que reírse!!!
Para finalizar nuestro tour, nos vamos a Meybod. Una ciudad de la que tampoco esperaba mucho pero tiene algunas cosillas interesantes. Esta en la lista de espera para entrar en los  Patrimonios de la Unesco, así que por algo sera.
Para cuando llegamos, el sol pegaba con justicia.  Lo primero que visitamos fue el Castillo de Narin. Castillo de adobe que esta bastante derruido pero lo normal, teniendo en cuenta de que tiene mas de 2.000 años de antigüedad. Lo están reconstruyendo y como todo en Irán, parece que va para largo. Aun así se puede ver que en su día tuvo que ser un lugar importante y con unas buenas defensas.
De aquí nos vamos a visitar un antiguo caravanserai donde el guía nos explica como hacían para cargar y descargar los camellos. Muy curioso el "muelle de carga" que tenían. Ahora utilizan el lugar unos cuantos artesanos y entre otras cosas, se pueden ver alfombras antiquisimas.
La visita a Meybod sigue en un antiguo "nevero" pero solo lo podemos ver por fuera. En invierno en Meybod hace mucho frío y junto al nevero hay un tanque que inundaban. Cuando ese agua se había congelado, la sacaban en bloques y la guardaban en el nevero para utilizar el hielo en el verano.  No acabamos de entender bien porque, pero el guía nos dice que esta cerrado. Por la mañana ha habido un accidente o algo así.
Y para acabar, nos vamos a un palomar. Ya no esta en uso pero esta perfectamente conservado. La función de este palomar era obtener fertilizante para sus cultivos a partir de los excrementos de las palomas. A diferencia de lo que pasa en España, parece que en Irán no los utilizaban para la cría de pichones.
Se acabo la excursión y para cuando llegamos al hotel ya no nos queda mucho por hacer.
Nos vamos a fumar otras shishas al mismo sitio de ayer y volvemos para cenar en el hotel. La comida esta bastante bien pero las raciones son pequeñas.
Después de cenar y un poco de relax nos vamos a la estación de autobuses.
La gente del hotel nos ha reservado los billetes para el autobús VIP que sale a las 12 de la noche con destino a Shiraz. Para que os hagáis una idea, estos buses son como los clase SUPRA de Alsa. Únicamente 3 asientos por fila y se reclinan un poco mas de lo normal.
El precio es de 125.000 Rials/persona (menos de 4€), que pagamos directamente en la estación de bus, y el viaje es de unas 7 horas.

Shiraz día 1


Día 6 del viaje.

Llegamos hacia las 7 de la mañana a Shiraz. El viaje ha sido tranquilo pero yo prácticamente no he dormido. Decidimos desayunar algo en la propia estación antes de empezar a buscar hotel. Un chico iraní que ha viajado en nuestro autobús se sienta con nosotros y estamos un rato charlando. Resulta que el también esta en Couchsurfing. En el autobús, como siempre, nos han dado alguna galleta, bollo,  zumo, o cosa así, y lo aprovechamos para el desayuno.
Cuando decidimos irnos al hotel, el chico se ofrece a ayudarnos con los taxis. Al decirle que somos 5 y que necesitaremos 2 taxis, él nos dice que no. Que si por nosotros no hay problema, que podemos viajar los 5 en un coche y así ahorramos dinero.  Esta sera la primera vez, pero a partir de ahora casi todos los viajes los haremos los 5 en un solo taxi.
Como primera opción para dormir, hemos elegido el Niayesh Hotel, y allá que nos vamos. El taxi no puede llegar hasta la puerta pero te deja a unos metros y aunque es una especie de laberinto, no tiene perdida y solo hay que seguir hacia adelante.
Al llegar nos dicen que tenemos que esperar un poco a que la gente haga el "check-out" para ver si hay habitaciones para ese día.
La espera, entre unas y otras cosas, se alarga bastante, pero al final nos confirman que tienen una habitación para 5 personas.
En la recepción tienen los precios en riales y en dolares, y la diferencia es muy grande. Nos intentan cobrar en dolares, 55 $ (unos 42€), pero insistimos que nos cobren el precio que aparece en riales y al final lo conseguimos,  1.000.000 IRR (unos 30€).
Después del bus nocturno, espera en el hotel y demás, estamos bastante cansados y con pocas ganas de visitar mucha cosa.
Empezamos con una visita a la mezquita Aramgah-e Shah-e Cheragh, donde no podemos sacar fotos pero es espectacular. Las chicas entran por un sitio diferente y después en la mezquita también vamos a salas diferentes, lo que hace que nos perdamos los unos de los otros. Bueno,  al final y tras esperar media hora o asi, nos volvemos a juntar.
Nos damos unas vueltas por el bazar, que es bastante laberíntico y nos encontramos con mas de un vendedor de alfombras que intenta llevarnos a su tienda.
Uno de ellos incluso nos enseña la tarjeta del embajador español. También nos cruzamos con algún vendedor que habla español. Comemos alguna cosa por ahi y seguimos paseando sin un rumbo muy fijo.
Por la tarde nos damos una vuelta por el exterior de los jardines Nazar y de la Ciudadela de Karim Khan. Es una zona muy agradable y es muy curioso ver la inclinación que tiene una de sus 4 torres. No entramos ya que estan a punto de cerrar.
Tampoco sabemos muy bien lo que hacer y pensamos que estaría bien acercarnos hasta el río. Paseo totalmente inutil ya que esta totalmente y no hay nada para ver.


Al final, como casi todas las tardes, decidimos ir a fumar unas shishas para rematar la tarde. Nos cuesta bastante encontrar un sitio y no puedo decir que fuera el mejor del viaje. Era un sitio lleno de humo y con poco atractivo. Estaba lleno de iranís y me parece que los turistas no eran muy habituales por allí. Las chicas mucho menos.
El día no da para mas. Vuelta al hotel, encargamos la excursión para el día siguiente  y cenamos allí.

Shiraz día 2

Día 7 del viaje.

Hoy el día se presenta súper interesante. En los alrededores de Shiraz esta Persépolis, una de las joyas de Irán y toca visitarla. La excursión la hemos contratado directamente con el hotel y también incluye Pasargarda y Nasqh-e Rostam. Nos sale por 25$, comida en restaurante incluida.
Vamos en furgoneta y además del chofer llevamos guía que habla inglés bastante bien y también nos acompaña un chico de Hong Kong, que no es que sea muy simpático y hablador. Con el calor que hacia, iba una chaqueta morado chillón de un material plástico y que nos sirvió para bromas durante 2 semanas.

Se tarda bastante en llegar a Pasargarda y la verdad es que a nosotros no nos acabo de convencer y en parte nos pareció una perdida de tiempo. Este lugar es Patrimonio de la Unesco y ocupa una extensión enorme, lo cual te hace imaginar que debió ser una ciudad grandiosa. El problema es que a día de hoy no queda prácticamente nada en pie. Si que esta bien conservada la Tumba de Ciro el Grande, que fue el primer rey aqueménida de Persia y quien mando construir esta ciudad y estableció aquí la capital de su imperio. Estamos hablando de hace unos 2.560 años.Cuando acabamos la visita aquí, el sol ya pegaba de lo lindo. Es lo que tienen las ruinas, que no hay sombras para resguardarnos.

Evidentemente, al llegar a Nasqh-e Rostam todavía pegaba mas y las sombras seguían desaparecidas. Este sitio arqueológico que contienen 4 tumbas reales del periodo Aqueménida talladas en la roca. Entre ellas la de Darío el Grande que fue quien mando construir Persépolis.
El sitio me recuerda un poco a Petra por lo de los fachadas esculpidas en la roca.
También tiene unos bajorrelieves muy bien conservados.

Se encuentra muy cerca de Persépolis así que bien merece una visita.Con esta visita se ha llegado la hora de comer y el guía nos lleva a un sitio que hay allí cerca y que esta lleno de turistas. La comida no esta mal y lo mejor es que comemos a la sombra de unos arboles. El guía nos dice que si comemos algún plato de mas de 60.000 IRR tenemos que pagar la diferencia. Casi todos entran de ese precio y si tienes que pagar algo no sera mas de 1 €.

Acabada la comida nos encaminamos hacia a Persépolis. Solo con ver el aparcamiento te puedes hacer a la idea de que es el sitio mas visitado de Irán.
No se que deciros.. Es un lugar majestuoso. Darío el Grande mando construirlo hace unos 2.530 años y Alejandro Magno destruirlo hace unos 2.340 años Se podía haber quedado en casita tranquilamente. A pesar de ello todavía quedan muchas columnas y escaleras en pie, y te puedes hacer una idea de como eran los edificios y la ciudad en sí. Persépolis era la capital ceremonial y se conservan muchos relieves en los que se representan ceremonia de la época.  Cambien se pueden ver por todos lados relieves en los que un león se como a un toro. Esto representa el Noruz o año nuevo persa. El león representa al verano que se come al invierno (toro). Esta fiesta se celebra el 21 de marzo con la llegada de la primavera.
Como curiosidad deciros que en Irán utilizan el calendario persa, que es solar como el nuestro pero que están en el año 1391. En los billetes de autobús este sera el año que os pondrán.
Seguimos con la visita a Persépolis hasta casi el atardecer y nos vamos de vuelta Shiraz.
Hoy la sesión de shisha sera en el propio hotel. En el tejado tienen una terraza que no esta muy bien habilitada pero para nosotros que no somos de mucho pedir, nos viene de lujo. Menos mal que no hay cervezas porque allí arriba nos podíamos haber bebido un par de cajas porque la temperatura de la noche es genial.
Reservamos el bus para la mañana siguiente a Isfahan, otra de las grandes joyas de Irán.
Por cierto os habéis fijado en el azul de las fotos. Yo jamas había visto un cielo mas claro.

Isfahan día 1

Día 8 del viaje

El día de hoy, en principio se presenta tranquilo. Viaje en autobús de Shiraz a Isfahan y poco mas.
Desde el hotel nos han reservado los billetes. Los taxis que hay al lado del hotel son bastante pequeños y como vamos con todas las mochilas, esta vez cogemos 2 taxis. Son 40.000 cada (poco mas de 1€).
Al llegar a la estación nos acercamos a la compañía con la que íbamos a viajar y allí están nuestros billetes. Son 85.000 IRR/persona (unos 2,5€) por unas 7 horas de viaje.
Mientras estamos esperando en la estación se acerca una persona de la compañía de autobuses con el teléfono en la mano y diciendo que llamaban del hotel.
No me lo puedo creer. Se me han olvidado 240€ en la habitación. Ayer había dejado una carterita debajo de una alfombra para rezar el dinero para no andar con el por la calle y esta mañana se me había olvidado. Que cabeza la mía.
Hay que actuar rápido porque no queda mucho para que salga el bus. Les digo que me voy corriendo a coger un taxi para ir hotel a por el dinero. Uno de los del bus sale detrás mio y me dice que los del hotel mandan un taxi con el dinero. Es increíble no. Os imagináis lo que son 240€ para un iraní?? Pues no solo lo devuelven sino que hacen todo lo que pueden para devolverlo.
El taxi tarda en llegar pero estamos seguros de que el bus no se ira hasta que llegue porque todos están pendientes de nosotros. Al final llega, me piden unos 6€ para el taxi y gestiones del hotel, me dicen, y yo se los doy encantado de la vida.
Que historia. Esta claro que Irán es un país con una gente maravillosa y que la mayoría de la gente en occidente tiene idea totalmente equivocada.
Una vez en el bus nos dan un zumo y algunas galletas. Lo típico. También paran media hora para comer, lo cual siempre es una incógnita, así que podéis ir tranquilos.
Al lado de Paula va sentada Afrooz, una chica iraní que es profesora de ingles. Ricardo y yo vamos sentados detrás, y se les ve que se lo están pasando muy bien. Creo que todos los iranís que hablan ingles están encantados de hablar con los turistas y no pierden la ocasión.
Llegamos a Isfahan un poco antes de lo previsto.Cuando para el autobús en la estación no sabemos si es nuestra parada pero Afrooz amablemente pregunta a la gente y nos dicen que si vamos al centro, esa es la mejor parada. Isfahan es la 3ª ciudad mas grande del país. Algo mas 1,5 millones, así que ya tiene un tamaño considerable.
Cogemos las cosas deprisa y corriendo y nos bajamos del bus. Mientras estábamos pensando a que hotel ir, rodeados de taxistas, la Rubia se da cuenta de que se había olvidado la Lonely en el bus. Coooño, yo me he olvidado el Kindle!!! Menudo día llevo.
Paula se da cuenta de que Afrooz le ha dado su teléfono y pensamos que lo mejor es llamarla a ella y ver si nos los puede coger.
Dicho y hecho. La llamo y le dijo a ver si nos puede hacer el favor. Una vez mas, la gente iraní nos da otra muestra de amabilidad.  Quedamos en que los recoja y ya la llamaremos cuando sepamos en que hotel estamos.
Llamamos al Hotel Dibai House que esta muy recomendado pero nos piden 50€ por una doble y 60€ por una triple. Mucho mas de lo que estamos pagando en este viaje por hoteles que están bastante bien. 
Al final nos vamos al Hotel Iran. Nos lo había recomendado un chico australiano en el hotel de Shiraz. Los precios son de 510.000 IRR la doble y 610.000 la triple desayuno incluido (unos 30€ en total). Las habitaciones están limpias y son bastante grandes. Buena elección.
Dejamos las cosas y nos vamos a dar una vuelta por la plaza y después nos fumamos unas shishas con unos tés justo enfrente del hotel. 250.000 IRR (7€). Las mas caras hasta el momento. Pasamos un buen rato con los locales. El chico que esta sentado justo a mi lado es campeón de Irán de culturismo y nos enseña fotos, periódicos y revistas de culturismo en las que aparecen él y amigos suyos. Hasta nos da su tarjeta de visita en la que pone "Iran's Bodybuilding Champion". Que risas nos echamos con ellos. Lo flipan total.
Después nos vamos a ver el puente Si-o-Se, y cenamos unos kebabs y unos bocatas en un fast-food por aquella zona por unos 250.000 ríales (7€). Hay muchos donde elegir.
Luego, cuando nos íbamos hacia el hotel, nos llama Afrooz para decirnos que viene a traernos el Kindle y la guía. Viene con sus padres y nos vamos todos a dar un paseo por la ciudad y acabamos otra vez en la plaza. Muy majos sus padres también. Dudo mucho que en ningún otro país pudiéramos haber vivido algo parecido. Que contentos de estar aquí.
Lo que en otro país habría sido un día funesto, en Irán se ha convertido en un día que nos ha dejado un sabor de boca inmejorable.

Isfahan día 2

Día 9 del viaje

Afrooz y sus padres ayer por la noche nos recomendaron que dejáramos las visitas a la plaza de Naghsh-i Jahan para mañana sábado. Esta semana ha habido disturbios en Teherán debido a la tremenda devaluación que esta teniendo el rial.
Ya se sabe que los viernes son los días mas propicios para las revueltas, así que les haremos caso.
Muy cerca del hotel esta el Palacio Hasht Behesht en la mitad de los jardines Bagh-e Shahid Rajai. El palacio esta en reconstrucción así que no se puede visitar pero si lo jardines. Es un sitio agradable, que merece la pena visitar si se pasa por delante lo que es normal ya que están situados en una de las principales calles de Isfahan.
Una de las curiosidades de Isfahan es que tiene un barrio armenio muy importante.
Es el barrio de Jolfa y en el se puede visitar la Catedral de Vank. Hay una caminata maja desde el centro pero a nosotros nos gusta caminar así que no es problema.
De camino nos encontramos con un bonito reloj solar.
La catedral es bastante curiosa y al lado hay un museo que bien merece la pena entrar a echar un vistacillo. Nos llamo mucho la atención un pelo en el cual, gracias a un microscopio, se podían ver letras escritas.
En Jolfa se aprecia claramente la influencia cristiana y tiene un europeo. Aprovechamos esta circunstancia y nos tomamos un café expreso en una cafetería que hay cerca de la catedral.
Ya empieza el calor otra vez y nos vamos, buscando sombras, en dirección a los puentes.  No se si lo había dicho, pero en el río no hay ni gota de agua.
A pesar de eso, los puentes son muy bonito y el paseo por los parques próximos al río te permite ver la vida de los iranís.
Es viernes, que es el día sagrado para los musulmanes, y como no podía ser de otra manera, aprovechan su día de fiesta para practicar su afición preferida. Si señor, el picnic. Nos deben ver con cara de pasar hambre porque otra vez se nos acerca un señor que va en bici y nos insiste en que aceptemos un melón. Como os imaginareis, al final lo convencimos de que se lo agradecíamos mucho pero no podíamos aceptarlo. Ya llevamos mas de una semana en Irán y todavía no nos hemos acostumbrado a su hospitalidad. Que mundo tan diferente.
Tras unas fotos y un pequeño descanso, empezamos a buscar un sitio donde comer. Ya es un poco tarde, el sol aprieta bastante y vemos una pizzeria. Ninguna maravilla pero bueno, nos sirve para llenar el estomago y seguir con nuestras visitas.
Por la tarde nos acercamos a la Plaza del Iman, o de Naghsh-i Jahan. No parece que haya habido ningún problema durante la mañana.
Visitamos el Palacio Ali Qapu y dejamos las visitas a las mezquitas para mañana por la mañana. El palacio tiene alguna sala interesante pero sobre todo merece la pena visitarlo por maravillosas vistas que nos ofrece de la plaza.
El acceso a la ultima planta esta cerrado pero nos dicen que a la mañana esta abierto. No estoy seguro de que nos hayan entendido lo que les hemos preguntado. El "yo creo que quieren decir..." "yo creo que han entendido que ..." es algo constante en este viaje.
Sacamos unas fotos de la plaza cuando esta atardeciendo, cambiamos unos euros en una de las oficinas de la Calle Sepah, que esta al lado de la plaza y nos vamos a fumar una shishas. Antes de cambiar dinero es recomendable que preguntéis en todas las casas de cambio.
En esta zona hay por lo menos 4 o 5. El primer cambio que hicimos fue a 31.000. Hoy ha sido a 41.000 IRR por euro. Que locura. Pobre gente. Con un cambio tan atroz su economía se va a hundir.
Esta vez la shisha nos la fumamos en un sitio muy curioso y a la vez muy turístico, Azadegan Teahouse. Esta dividido en 2. Una parte para hombres y otra mixta. Todas las paredes llenas de cachivaches varios. El precio de 5 tés y un par de shishas, 250.000 IRR (6,5€).


Para cenar, esta noche nos vamos a un italiano que esta entre el hotel y el puente. El sitio es el restaurante de un hotel y hay que bajar unas escaleras. Parece un sitio caro, pero para nada. La verdad es que es justo lo que estábamos buscando porque nos apetecía cenar ligero y tienen un buffet con ensaladas que nos vienen de perlas, por unos 80.000 IRR/persona (unos 2€). De aqui a la cama.

Isfahan día 3


Día 10 del viaje

Es el día de abordar a fondo la plaza del Imán y sus alrededores. El lugar mas significativo de Irán junto a Persépolis.
Aun así, empezamos con la visita a la Mezquita Jameh (del Viernes) que esta al noreste de la plaza y del bazar. Decidimos hacerlo así porque es el punto mas alejado y luego ya vamos acercándonos. Para llegar hasta allí vamos en taxi.
Esta mezquita esta considerada la mas grande de Irán, con 200.000 m2 , y se pueden apreciar diferentes diseños islámicos de un periodo de 800 años. La mezquita es enorme, con su 4 iwanes, y os podéis pasar mucho tiempo dando vueltas de un lado para otro y sacando fotos a bóvedas, patios, minaretes, fachadas y todo lo que os podáis imaginar.
A la salida de la mezquita nos vamos en busca del bazar, que tenemos que cruzar de punta a punta, de camino a la plaza del Imán.
Nos perdemos mas de una vez, pero al final conseguimos llegar.
Ayer visitamos el Palacio Ali Qapu y hoy sera el momento de las 2 impresionantes mezquitas.
Empezaremos por la Mezquita del jeque Lotf Allah. Este es otro de los edificios que construyo el Shah Abbas I que es a quien debemos la mayoría de los hermosos edificios que podemos apreciar hoy en día en Isfahan, y quien decidió trasladar a aquí la capital de Persia en el año 1592.
Para acabar con nuestras visitas "obligatorias" vamos a la Mezquita del Shah, también en la plaza. Una cosa muy curiosa en esta mezquita, es que si te pones
en el centro vertical de la cúpula grande, se dice que todo lo que dices es repetido siete veces por Allah (uno oye muy claramente siete veces el eco). Haced la prueba y comprobareis que es cierto.
Por la tarde yo  me separo de los demás porque quieren ir de tiendas y hacer algunas comprillas. A mi eso me aburre un montón y de esta manera ellos andan mas tranquilos y yo también. En un par de horas nos volveremos a encontrar enfrente de la Mezquita del jeque Lotf Allah.
Paso un rato pululando por ahí y leyendo la guía al final decido ir a visitar el Palacio de Chehel Sotun y sus jardines, que tiene muy buena pinta. La traducción literal es "40 columnas".
La decisión fue un poco tardía porque entre al principio fui a una puerta que no era la correcta, que después tampoco encontraba la puerta correcta y que ya tenían el horario de invierno, para cuando llegue a la entrada, ya era demasiado tarde. Que se le va a hacer. La próxima vez sera.
Vuelvo a la plaza a esperar a que lleguen los demás. Mientras tanto aprovecho para escribir una postal y sacar mas fotos con la puesta de sol en esa maravillosa plaza.
Con unos minutos de retraso aparece Paula que viene a buscarme. Resulta que se han juntado con un señor mayor que habla ingles y están super entretenidos con él tomando un té.
Vamos hasta una tetería que hay en la mitad del bazar, en una especie de sótano, donde están los demás tomándose unos tés y fumando unas shishas con Alí, que es como se llama el señor iraní. El sitio es para locales y solo nos cobran 60.000 riales por los tés y las shishas. Para que veáis como son los precios para los locales.
Se ofrece a enseñarnos unas cuantas cosas que no hemos visto y que no aparecen en las guías, y nosotros aceptamos encantados.

Nos hace una visita de 2-3 horas en las que nos enseña un montón de cosas y nos cuenta un montón de curiosidades y anécdotas sobre Isfahan y sobre Irán.
Con él vivimos un momento que estuvo a punto de ser uno de los mas embarazosos de mi vida. Estábamos visitando el barrio judío, que no teníamos ni idea de que había uno en Isfahan y a Alí no se le ocurrió otra cosa que fuéramos a ver un judío.
Su idea era llamar a la casa de un judío, que decía que él conocía, hacerle salir de casa, ya de noche como era, y que nosotros le viéramos la cara. Os podéis imaginar la escena. Menos mal que al final le dijimos que aquí también hay judíos y que ya habíamos visto muchos. No sé si se quedo muy convencido pero aunque estábamos ya en la puerta, al final no le llamo.  Yo no podía dejar de pensar que aquello era como como que te lleven a ver un animal a un zoo. Que vergüenza.
La verdad es que el hombre era muy simpático y se desvivía por enseñarnos cosas. Si llegamos a estar con él todo el día, nos enseña toda la ciudad.
Nos lleva a cenar a un antiguo hamman. No para de decirnos que es la mejor comida de Irán. La comida esta buena pero no deja de ser pollo con arroz y, berenjena en alguna de sus variantes. Como ya os he dicho, la variedad en el país no es muy grande. Pagamos 1.000.000 IRR (unos 25€) por la cena de los 6, que es mas de lo que estamos pagando otros días pero por el rato que hemos estado con Ali merece la pena.
Este hombre se desvive por ayudarnos y nos acompaña hasta la misma puerta del hotel. Dice que le viene de camino a casa pero vete a saber.
Se acabo nuestro tiempo a Isfahan y creo que no ha defraudado a nadie.